En el mercado existen numerosos tipos y modelos de cámaras de videovigilancia diferentes, pero no todas cumplen la misma función (vigilancia, control laboral, control de calidad, control de accesos…) ni están indicadas para todo tipo de instalaciones. Las cámaras de seguridad IP, cámaras de seguridad motorizadas o las cámaras inalámbricas, por ejemplo, no están indicadas para las Comunidades de Vecinos.
En las fincas, por regla general, no existe una red informática, por lo que la instalación de cámaras de vigilancia IP no está justificada en ningún caso. Las cámaras de vigilancia inalámbricas (wifi) no ofrecen las garantías de seguridad, estabilidad y privacidad de los usuarios que un edificio de viviendas necesita y las cámaras motorizadas con zoom están prohibidas en este tipo de instalaciones tal y como indica la Agencia Española de Protección de Datos. Por esto, estos son los tipos de cámaras de videovigilancia que recomendamos que se instalen en una Comunidad de Propietarios:
≈ Cámaras de seguridad interiores de la Comunidad de Vecinos
Las cámaras de seguridad más indicadas para el interior de las Comunidades de Vecinos (portales, trasteros, ascensores, rellano…) son las cámaras de vigilancia tipo domo o burbuja anti vandálicas y con calidad Full HD. Este modelo de cámaras de vigilancia, es discreto, con un atractivo diseño y fácil de integrar en interiores. Disponen de una pantalla protectora de alta resistencia ahumada, por lo que los intrusos no saben dónde enfoca la lente. Disponen de LEDs infrarrojos por lo funcionan a la perfección de noche y en situaciones de baja luminosidad, como el interior de los garajes.