Contenedor gris, marrón, azul, amarillo, verde… el abanico de colores es realmente amplio y en ocasiones resulta muy complicado saber dónde depositar cada residuo. Cada vecino genera de media 524 kg de residuos urbanos al año, por lo que merece la pena prestar mucha atención al reciclaje y hacerlo correctamente. Os presentamos una pequeña guía para no perdernos a la hora de reciclar:
Contenedor marrón:
Para muchos vecinos todavía es un desconocido, ha sido el último en colorear nuestras calles y todavía no está presente en todas las comunidades de propietarios. Se trata de un contenedor gris con tapa marrón destinado a los residuos orgánicos: todo tipo de restos de comida (fruta, cáscaras de marisco y frutos secos, carne, pescado…), flores y plantas, servilletas de papel usadas, tapones de corcho etc. Gracias al reciclaje de estos residuos de obtendrá tanto biocombustible (biogás) como compost (fertilizante).
Contenedor naranja:
Es muy similar al marrón, pero este dispone de tapa naranja. Si la comunidad de propietarios todavía no dispone del contenedor marrón, depositaremos en el naranja los restos orgánicos antes mencionados y además otro tipo de productos no reciclables como chicles, compresas, pelo, preservativos, polvo, colillas etc.
Contenedor amarillo:
En este contenedor debemos depositar el plástico que habitualmente encontramos envolviendo alimentos como bandejas desechables, botellas, envoltorios, tapones, envases de yogures, el plástico de productos de limpieza y de higiene etc. También las latas de conserva y bebidas, los aerosoles y tetrabricks. Debemos recordar que no todos los plásticos son iguales, las macetas de plástico, juguetes, cubos deberán ir al punto limpio.
Contenedor azul:
Está destinado al papel y cartón: cajas, revistas, publicidad, libros, periódicos… Eso sí, si disponen de otros materiales como plástico o piezas de metal debemos quitárselas. Cabe recordar que las servilletas y el papel de cocina irán al contenedor marrón o en su defecto, al naranja.
Contenedor verde:
Deberemos depositar todos los envases de vidrio: botellas, tarros, botes… eliminando siempre los tapones. No debemos depositar los objetos de cristal como espejos, vasos, jarras, cristal de ventanas o baldas etc. El vidrio no es lo mismo que el cristal, el cristal tiene en su composición otros elementos como el óxido de plomo o el óxido de bario, por lo que no deberá depositarse en el contenedor verde.
Contenedor de ropa:
El Ayuntamiento pone a disposición de los vecinos contenedores de ropa y calzado para su reciclaje. Son metálicos y se encuentran en puntos fijos, se puede consultar su ubicación a través de la web del Ayuntamiento.
Punto limpio:
Existen puntos limpios fijos y también puntos limpios móviles. Los puntos limpios móviles estarán operativos en los días y horarios señalados. En los puntos limpios debemos depositar los residuos que no tienen cabida en los contenedores convencionales como los muebles, escombros, pintura, herramientas, electrodomésticos, baterías, madera, metal… Están disponibles para los particulares pero no para las empresas.
Reciclaje de pilas:
Además de en el punto limpio, también podemos depositar las pilas en algunos supermercados y en las paradas de autobús que cuentan con depósitos para su reciclaje.
Reciclaje de medicamentos:
Los medicamentos y los envases de medicamentos (aunque estén vacíos), deberán depositarse en los puntos SIGRE que podemos encontrar en las farmacias.
Servicio de recogida de muebles y enseres:
Si no podemos desplazarnos a un punto limpio, el Ayuntamiento de Madrid ofrece el servicio gratuito de recogida de muebles y enseres. Está destinado exclusivamente a particulares y podemos solicitarlo a través del 010, en línea y a través de Twitter.