En las comunidades de vecinos es normal compartir aquellos productos que podemos necesitar en un momento crítico, desde un taladro a los pases de la piscina comunitaria para que puedan entrar los hijos de tu cuñado, pero lo que no era tan habitual era la posibilidad de compartir la energía que consumimos dentro de nuestros hogares.
Ya son varias las empresas que han puesto en marcha este nuevo modelo, como Comunidad Solar (así se llama a este modelo de distribución).
El modelo utiliza las propias instalaciones físicas de la comunidad, su azotea y la de otras edificaciones cercanas, como naves industriales, que se encuentren en un radio no superior a los 500 metros.
Esta solución está siendo especialmente bien vista por las nuevas edificaciones tipo lofts, que en muchas ocasiones son comunidades que se encuentran dentro de polígonos industriales y cuentan con amplios espacios donde poder instalar placas solares comunitarias. Esta iniciativa permitirá a los vecinos beneficiarse de las ventajas del autoconsumo renovable, sin necesidad de contar con una instalación propia ni de realizar inversiones.
Con cerca de 200 paneles fotovoltaicos con una potencia total de 80 kW, cerca de 150 vecinos pueden aprovecharse de una energía no contaminante que dejará de emitir más de 700 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 30 años, una cantidad nada despreciable.
Según los profesionales de PVSolar, “los sistemas solares de autoconsumo pueden suponer un ahorro en la factura anual del 30% en el caso de comunidades de vecinos; un 50% para empresa y negocios; y hasta un 70% en viviendas unifamiliares. Este ahorro se produce por una triple vía: la energía producida por la instalación que el usuario no tiene que comprar, la compensación por los excedentes de energía no consumida, que es vertida a la red, y el ahorro por menores impuestos”, aunque actualmente la compensación por los excedentes de energía no consumida sigue siendo un “mal negocio” para el consumidor.
En España se considera que cerca del 60% de los habitantes viven en comunidades de vecinos, entre pisos y chalets, y con tan solo el permiso de un tercio de los vecinos de nuestra comunidad, podemos iniciar nuestra comunidad solar, “es la pedagogía que necesitamos ahora” insisten desde PVSolar, “en un bloque con 12 vecinos, si cinco desean participar en esta revolución energética, nosotros nos encargamos”.
