Andrés Calamaro afirma en una canción (‘Las oportunidades’) que cómo, cuándo y por qué son demasiadas preguntas. Quizá en el caso del amor, pero no en el de las cerraduras, cuestión más práctica y cotidiana, pero no por ello menos importante.
Porque una intervención de este tipo no resulta especialmente cara y nos puede evitar desembolsos mucho mayores si, por la razón que sea, consideramos que debemos cambiar la cerradura y no lo hacemos. Si te preocupa cuánto cuesta cambiar una cerradura, conviene tener en cuenta que mucho menos que las posibles consecuencias de que entre alguien en nuestra propiedad.
Sobre todo si hemos perdido las llaves por la zona, o volvemos a nuestra propiedad después de años de haberla explotado en régimen de alquiler, como arrendadores. En ese caso, las llaves han pasado por muchas manos, no siempre localizables, por lo que urge un cambio de cerradura para contar con juegos de llaves que solo pertenezcan a los propietarios.
Dicho esto, el cambio de una cerradura simple, mano de obra incluida, no debería costar más de cien euros, aunque cambiar una cerradura en puerta blindada y con llaves de seguridad, el presupuesto se encarece.
Pasos para cambiar una cerradura
Ya hemos respondido el por qué de cambiar una cerradura. También el cuándo; es decir, si vuelves a tu casa tras haberla alquilado, o si tienes sospecha de que alguien más que tu círculo de confianza puede tener tus llaves. También, claro, si la cerradura ofrece síntomas de desgaste y se ha quedado vieja tras años de uso, y le cuesta hacer su trabajo por mucho lubricante que incorpores.
Dicho esto, para cambiar una cerradura lo mejor es que contactes con profesionales. Si bien cambiar un bombín puede resultar una labor relativamente sencilla, también es verdad que los acabados no son los mismos y que los distintos engranajes de la cerradura se pueden ver afectados.
No obstante, si quieres hacerlo por ti mismo, estos son los pasos a seguir:
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Retira el viejo escudo
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Desinstala el bombín antiguo
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Coloca el nuevo bombín
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Instala el nuevo escudo de seguridad
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Monta el nuevo escudo
Ventajas de contar con cerradura en puerta blindada
Si quieres asegurar tu vivienda contra posibles amenazas como allanamientos de morada y evitar que te roben en casa, la puerta acorazada, con su correspondiente cerradura de seguridad, es una gran idea. Además de los sistemas de videovigilancia y las alarmas, una buena puerta blindada te dará más sensación de protección y pondrá más difícil el trabajo a los posibles delincuentes.
Permiten, por ejemplo, usar llaves más seguras, como la llave de doble paletón, muchísimo más difícil de replicar, y diseñada para evitar métodos de robo como la ganzúa. Porque las puertas acorazadas ofrecen distintos tipos de cerraduras, como la de llave maestra, por ejemplo, pero también mecanismos multifunción y cerraduras eléctricas.
Un paso adelante en el mundo de las cerraduras que además de mayor protección ofrece más comodidades y recursos, así como soluciones que nos alejan de la dependencia de las llaves y del constante y lógico miedo a perderlas.
