El Real Decreto 763/2020 establece que “para los titulares de instalaciones térmicas centralizadas existentes en los edificios nuevos y existentes, la obligación de instalar contadores individuales que midan el consumo de energía térmica de cada consumidor, siempre que sea técnicamente viable y económicamente rentable. Excepcionalmente, para el caso de calefacción, y siempre que no sea técnicamente viable el uso de contadores individuales, se impone la obligación de instalar repartidores de costes de calefacción, siempre que esta opción sea económicamente rentable”. La normativa completa la puedes consultar aquí.
Obligación contadores individuales para la calefacción central
Tras un periodo de adaptación de casi 2 años, las comunidades de vecinos deben poner contadores individuales para conocer y abonar cada vecino la parte correspondiente a su consumo de la calefacción central y en caso de no hacerlo, las comunidades se enfrentan a sanciones.
En estos días del mes de mayo, algunos profesionales ya nos han informado que empiezan a recibir llamadas de los presidentes de sus comunidades preocupados por conocer si sus instalaciones ya cumplen la norma. En especial las provincias más frías de España, que son las primeras que han de acometer el cambio ya que su temporada de calefacción central se inicia antes.
Los administradores han informado en estos últimos meses de los pasos que se deben de seguir. Tras reunirse la comunidad de vecinos y acordar la solicitud de uno o varios presupuestos, necesarios para acometer las obras en aquellas comunidades de vecinos que son anteriores a 1998. Una vez aprobado el presupuesto más adecuado a las necesidades de la comunidad, la empresa contratada ha de instalar un contador de calefacción individual en cada vivienda o bien repartidores del coste de la calefacción con lectura remota en cada radiador de cada vivienda.
Existen comunidades de vecinos donde la imposibilidad técnica de la instalación de estos contadores individuales les puede eximir del cumplimiento de la norma, pero un profesional ha de emitir un certificado donde lo justifica, y una declaración responsable.
En el estado actual de crisis económica que están viviendo muchos vecinos, los instaladores confirman que “muchas propiedades se están decantando por el alquiler de los contadores individuales, para evitar tener que hacer un desembolso importante desde el primer día, y que además se abona con el ahorro energético generado”. Este servicio no excede los 10 euros mensuales según han informado diferentes Administradores de Fincas consultados.
Vecino que se niega a poner un repartidor de costes
La normativa establece que si un vecino se niega a instalar su contador individual o los repartidores de coste de la calefacción en cada radiador, deberá abonar la cuota más alta de la que pagan sus vecinos. Una medida que busca fomentar el ahorro en las comunidades de vecinos y que castiga a aquellos que no son solidarios con el resto de la comunidad.
Para los administradores de fincas “donde se están teniendo mayores demoras es en las comunidades de vecinos más antiguas, donde personas mayores no terminan de entender los beneficios de esta medida. El haberlo dejado para el final del período de instalación voluntaria, también está provocando que las compañías instaladoras tengan ahora un alto índice de solicitudes, que está dilatando el proceso. La imposibilidad debido a la pandemia de realizar reuniones presenciales en las comunidades de vecinos ha sido para los profesionales, otro motivo de retraso en la toma de decisiones.
Las multas por incumplir esta normativa oscilan entre los 1.000 y los 10.000 euros, y serán las comunidades autónomas las encargadas de inspeccionar y sancionar. El titular, bien la comunidad de propietarios o el dueño del edificio son los responsables en los que recaería las sanciones administrativas.